Más del 60% de los españoles se levantan con dolor de mandíbula, cansancio y dolor de cabeza; síntomas frecuentes en el trastorno de bruxismo. Con este artículo abordaremos por qué el estrés y el bruxismo están relacionados y qué podemos hacer a nivel psicológico para afrontarlo.
¿Qué es el bruxismo?
El bruxismo es una patología física, un hábito en su mayor parte nocturno en el que se aprieta de manera involuntaria la mandíbula y en el que se rechinan los dientes, produciendo como molestias dolor muscular, cefaleas, erosión de los dientes y síntomas articulares. Es una patología silenciosa ya que, por lo general, la fricción de los dientes suele hacerse en las horas de sueño.
Esta patología comienza a aparecer en edades más tempranas, padeciéndola un gran número de adolescentes. Teniendo un gran impacto en su aparición el estrés con el que se convive en una sociedad cada vez más competitiva y exigente, desencadenando que el bruxismo se pueda padecer no sólo durante el sueño si no también en los periodos de vigilia.
¿Qué relación tiene el bruxismo con la ansiedad?
El bruxismo, las aftas y otros tipos de problemas odontológicos son producto del estrés y de episodios de ansiedad. En sí mismo, el estrés es un proceso adaptativo que es necesario para el ser humano; ayuda en el desarrollo de todas las actividades. El problema aparece cuando el estrés alcanza unos límites en los que no se puede manejar, produciendo estados de tensión física y emocional que terminan enfermando al individuo, como podría ser lo referido al bruxismo donde se produce a nivel local un problema funcional con consecuencias en los músculos tanto a nivel mandibular como cervical.
Entre las circunstancias más comunes que desencadenan el estrés tenemos:
- Situaciones impredecibles y de alto impacto, como por ejemplo el fallecimiento de un familiar, divorcios etc.
- Momentos en los que hay sensación de incontrolabilidad, como el que sucede en el caso del estrés laboral, o cuando se padece dolor crónico.
- Situaciones que, aunque no sean de alta demanda por separado y suceden a veces de manera desapercibida, en conjunto sí lo son; son la suma de muchos acontecimientos cotidianos. Por ejemplo, tener que estar pendiente a la vez de una casa, los niños, los exámenes, el trabajo etc. Esto produce agotamiento psicológico que se vuelve crónico ya que se percibe como algo que no termina o que no se puede finalizar a corto plazo.
- Los tipos de afrontamiento y de recursos que se manejan. No es lo mismo confrontar la situación centrándose en el problema o, por el contrario, en la emoción. La sensación es diferente y es clave para superar una situación de estrés.
Tratamiento psicológico del bruxismo:
El bruxismo se debe controlar antes de que pueda llegar a erosionar por completo los dientes y que pueda ocasionar no solo un problema estructural y funcional si no también estético ya que puede dañar profundamente a una persona a nivel emocional por las consecuencias, entre otras, de poder verse sin dientes, es por ello por lo que se recomienda un enfoque multidisciplinar, en el que no solo se tenga en cuenta los síntomas físicos, como por ejemplo cuando se coloca una férula de descarga , si no en el que se solucione de manera prioritaria la causa del problema en sí, es decir, el .
Consejos para manejar el estrés cuando hay un episodio aislado de bruxismo:
- Mantener una dieta equilibrada que favorezca un estilo de vida saludable
- Realizar ejercicio físico, el deporte ayudará a tener cierta sensación de control además de relajar a nivel fisiológico cierto grupos musculares
- Mantener un correcto hábito del sueño, el cansancio en sí mismo es un síntoma de ansiedad que hace aumentar la sensación de irritabilidad y por consiguiente aumentar la presión en la mandíbula y en los dientes
- Realizar ejercicios de relajación y de respiración profunda que produzcan una distensión muscular y ayude a bajar la intensidad del dolor
Como podemos comprobar el estrés, si no se corrige ofertando las herramientas que el individuo necesita para saber manejar cualquier situación de la vida, puede producir incluso enfermedades psicosomáticas con manifestaciones físicas muy importantes como es el caso del bruxismo. Si se observa que este tipo de trastorno no es un hecho aislado si no que se vuelve crónico se recomienda, como algo imprescindible para la solución total de los síntomas de estrés, que se acuda a un especialista en ansiedad ya que podrá determinar de manera más individual las situaciones de ansiedad que se experimentan y las maneras de afrontarlo más positivas para el caso, pautando las estrategias adecuadas y enfocándolas a cada persona para la resolución del problema emocional que desenbocará en el bienestar físico y mental.
Muy interesante!
Gracias por los consejos, me ha parecido muy interesante